Recientemente la Asociación Salvemos el Ega-Ega Bizirik ha conocido la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Navarra referente al Proyecto Sectorial de Incidencia Supramunicipal que está realizando la Mancomunidad de Montejurra para aumentar drásticamente las extracciones de agua del acuífero de Lóquiz. Como bien es conocido las actuales extracciones de agua producen impactos muy negativos en los ecosistemas de nuestro valle y resto de la cuenca, al secar las fuentes y manantiales que fluyen por nuestro entorno y reducir las posibilidades de agua para regadío de los regantes tradicionales.
Tal y como nos informan desde la Fundación Sustrai Erakuntza y el despacho jurídico Arankoa, que ha llevado el caso, la sentencia recibida es contraria a nuestros intereses de defensa del medio ambiente y el patrimonio de nuestro valle. Según se puede leer en la sentencia, el juzgado basa su fallo en el hecho de que lo recurrido es un proyecto y no un plan. Y al no tratarse de una planificación, no considera necesario cuantificar la cantidad de agua que se extrae del acuífero de Lóquiz, y por tanto no repara en los impactos que ya la actual actividad genera.
Porque hay que tener en cuenta que el actual bombeo de agua subterránea que realiza la Mancomunidad de Montejurra viene a ser de una cantidad menor a la mitad del que pretende para el futuro, de ponerse en funcionamiento las bombas e instalaciones del nuevo proyecto. Y la extracción actual ya genera importantes impactos medioambientales, al dejar secas gran parte del año los manantiales que hasta hace unos años llevaban agua todo el año. ¿Que pasará cuando esa extracción se duplique teniendo en cuenta que rio y acuífero están íntimamente comunicados?´
Según los datos de que disponemos, del acuífero Alborón-Ancín Montejurra está extrayendo actualmente 5 hectómetros cúbicos al año: 2 en el pozo de Ancín y 3 en el de Mendaza. Sin embargo, si se pusiera en marcha el proyecto de la mancomunidad, las extracciones aumentarían más del doble. En el proyecto aprobado se contempla la construcción de dos nuevos pozos en Mendaza, de manera que la extracción pasaría de los 3 Hm3/año actuales a los 10 Hm3. De este modo, la extracción total del acuífero de Alborón-Ancín realizada por Montejurra alcanzaría los 12 Hm3 al año, con la posibilidad de aumentar hasta los 18 Hm3/año en los momentos de mayor demanda, además hay que tener en cuenta que en época de estiaje (verano) la extracción supera en más de un 40% a la media del año que es cuando menos agua baja en el rio y más se extrae.
El bombeo de agua que realiza la Mancomunidad de Montejurra tanto en Ancín como en Mendaza se ha ido incrementado con el paso de los años, lo que ha producido de manera paralela al agostamiento de los manantiales. Aunque aún no se ha realizado un estudio real y completo sobre el funcionamiento y la respuesta del acuífero de Lóquiz a los bombeos, todos los veranos podemos comprobar que los ecosistemas fluviales están completamente debilitados, por falta de agua. Creemos, por tanto, que la administración debe de realizar un estudio concluyente, que demuestre que la explotación se puede realizar sin afección a nuestro entorno. Y mientras ese estudio y esas conclusiones no sean patentes, no permitiremos que se aumenten las extracciones de agua de nuestro entorno.
También es importante saber que la Mancomunidad de Montejurra está extrayendo agua actualmente de manera irregular 2 Hm3/ año en el pozo de Ancín y 3 Hm3/ en el de Mendaza (SIN CONCESION, la actual sentencia que hemos conocido no entra a valorar este aspecto, declarándolo propio de otra administración y en proceso de autorización…
A nuestro parecer, creemos que no es posible que se desarrolle este proyecto sin tener antes las concesiones de agua de la CHE. Y ello es así porque este organismo debe de valorar antes si el acuífero es capaz de aportar el agua que se le pretende extraer sin perjuicio para el medio ambiente. Por lo tanto, sin esa valoración y sin esa autorización, el proyecto no se debería de haber iniciado. Si no se conoce la capacidad del acuífero, no es de recibo que se construyan unas infraestructuras (conducciones, depósitos…) que no conocemos si van a ser útiles, y sin embargo ya están realizadas.por lo que pedimos realizar con urgencia un estudio de capacidad, estructura y funcionamiento del acuífero y de la posibilidad de afección.
El estudio deberá tener en cuenta las afecciones al sistema que forma dicho acuífero con el Río Ega, tanto de las extracciones reales que se vienen realizando, con o sin autorización, como de las previstas en el futuro, así como las concesiones actuales, el cambio climático y el caudal ecológico del Río Ega.
Por lo tanto, desde la asociación Salvemos el Ega-Ega Bizirik continuaremos trabajando por la defensa de los ecosistemas de Valdega y de su modo de vida tradicional, ligado al agua, sus fuentes y el río Ega. Y para ello emplearemos todas las posibilidades a nuestro alcance, sean estas actividades jurídicas, técnicas, o de concienciación y movilización social pacifica.
En Valdega, a 6 de febrero de 2015
Salvemos el Ega-Ega Bizirik
Urbizi 
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